Recordará que definimos “Convergencia” como ese lugar donde llegan a reunirse todos los aspectos relacionados con nuestra vida para llevarnos al encuentro de la definición de nuestro propósito.  La pregunta de ¿Para qué estoy en este mundo?  Es una de las que más tensión puede generar en la vida de un ser humano y por momentos se convierte en un desafío tan grande que muchos han optado por evadirla o engañarse a sí mismos dando por sentado que lo han encontrado cuando sencillamente lo que han hecho es conformarse con algo por debajo de lo que realmente representa su plena y total satisfacción.

Por otra parte, también hemos caído en la trampa de contestarla muy a la ligera, sin profundizar en lo que ella representa y la implicación de lo que está en juego, es decir, nuestra propia vida.  Encontrar nuestro propósito no es imposible, pero tampoco creo que sea sencillo (aunque existirán sus excepciones).  Lo cierto del caso es que cada uno de nosotros lo puede y está llamado a encontrarlo. Es más, todos tenemos la oportunidad de hacerlo.  Estoy convencido que todos disponemos de los elementos ya necesarios para poderlo encontrar.  Requerirá en algunos casos paciencia, en otros perseverancia, a lo mejor un poco de esfuerzo y en la mayoría de los casos una estratégica combinación de todos incluyendo otros elementos que en cada caso particular sea necesario.

Seguramente no soy yo el más indicado para mostrarle el camino a seguir en su particular estilo y forma de vida.  Tampoco considero tener las repuestas a lo que su vida desea encontrar. Pero si estoy convencido que usted las tiene.  Por esa razón, de  acá en adelante me permitiré avanzar proponiéndole algunas preguntas.  Espero que cada una de ellas, junto con el desarrollo que daré le puedan ser útiles para encontrarse a usted mismo y la razón de estar en este mundo.